Las croquetas tienen una base de bechamel mezclada con otros ingredientes. Se pueden hacer croquetas prácticamente de todo lo que nos guste, aunque habitualmente se utilizan ingredientes salados. Las podemos preparar de jamón, queso, atún, morcilla.. También las podemos hacer vegetales, de cebolla, por ejemplo, o de espinacas y piñones como las que hemos hecho. Lo que todas las croquetas tienen en común es que están buenísimas. En serio, probar a hacerlas de lo que mas os guste porque seguro que os van a encantar.
Pero no dejéis de hacer y probar estas porque es una combinación riquísima de sabores y además una forma genial de incluir la verdura en las comidas.